El estudio de las principales portadas de las
catedrales puede ayudarnos a reconocer los cambios de estilo producidos en la
escultura gótica española. En el siglo XIV se desplazaron los centros
artísticos de Burgos y León y aparecieron nuevos talleres escultóricos en
Toledo, Vitoria, Navarra y Levante, con una influencia que ya no es
exclusivamente francesa sino también italiana. Estilísticamente, se produjo un
alargamiento del canon de proporciones y las formas se hicieron más sinuosas,
mediante una talla más delicada y preciosista. También fue en esta época cuando
los tímpanos de las portadas empezaron a agrandarse para albergar composiciones
narrativas más amplias y complejas. Las esculturas se hicieron más numerosas, de
menor tamaño que en el siglo anterior, y se organizaron en pisos o franjas horizontales,
que desglosaban toda la vida de Cristo de manera secuencial.
El primer modelo de estas características fue
la Puerta del Reloj de la Catedral de Toledo, también llamada de los Reyes
Magos, de la Chapinería o de la Feria; se realizó entre finales del siglo XIII
y principios del XIV. Según Azcárate, el modelo alargado del parteluz y de las
jambas es sintomático de una importante evolución artística. Por otra parte,
los relieves tienen un tratamiento algo desigual y además fueron encalados en
el siglo XIX, lo que hace difícil apreciar su calidad. En cuanto a su
composición en franjas, se relaciona con las portadas del crucero de Notre Dame
de París; estilísticamente, tiene influencias de la escultura italiana del Trecento,
visibles en la curvatura de los cuerpos, los pliegues de los ropajes y cierto
abigarramiento de las figuras; por su iconografía es similar a la portada de la
iglesia de Santa María la Real de Olite.
El tímpano está ocupado por cuatro franjas separadas
por series de arcos apuntados con gabletes, bajo los que se narran
secuencialmente escenas de la vida de Cristo, de la Virgen María y de la
Resurrección. La lectura comienza en la esquina izquierda de la fila de abajo,
donde se representan las siguientes escenas:
1. Anunciación,
según la iconografía característica del siglo XIII, es decir, con María y el
ángel Gabriel enfrentados de pie, y entre ambos unas ramas florecidas.
2. Visitación
de María a su prima Isabel, que se abrazan.
3. Natividad
de Cristo, adoptando la variante iconográfica de Santa Brígida, en la que la
Virgen se arrodilla para adorar al Niño y San José le acompaña pensativo.
4. Anunciación
del ángel a los pastores.
5. Viaje
de los Reyes Magos siguiendo a la estrella mientras Herodes se asoma desde su
palacio.
6. Adoración
de los Reyes Magos, con el primero arrodillado y sin corona ofreciendo monedas
de oro al tiempo que los otros dos dialogan entre sí.
7. El
sueño de los Reyes Magos, en el que son advertidos de la persecución contra el
Niño Jesús.
8. Matanza
de los Inocentes por parte de varios soldados que visten a la manera medieval,
con cota de malla y casco, bajo la atenta mirada de Herodes.
La narración continua por el extremo derecho del
segundo piso y avanza hacia la izquierda mostrando los siguientes episodios:
9. Sueño
de San José, en el que es alertado del peligro por un ángel que se acerca a su
oído.
10. Huida
a Egipto a lomos de un burrito.
11. Jesús
en la escuela con otros niños y un maestro barbado que indica un libro mientras
blande una vara para azotarle, según una historia tomada de los evangelios
apócrifos.
12. Jesús
entre los Doctores, representado dentro de un edificio que simboliza el Templo.
13. Presentación
en el Templo, con la Virgen María seguida por San José y una acólita que lleva
dos pichones en un cesto.
14. Recriminación
de San José y María al Niño Jesús por su ausencia, según una escena familiar
tomada de una tradición apócrifa que también fue representada por el pintor Simone
Martini.
15. Bautismo
de Cristo en el río Jordán, rodeado por San Juan y un ángel que le prepara la
túnica.
16. Las
Bodas de Caná divididas en dos escenas: una donde aparece el banquete nupcial y
el diálogo entre Cristo y su madre María, y otra donde se llenan dos grandes
tinajas de vino.
Sigue por el extremo izquierdo del tercer piso,
donde se ven estas escenas:
17. Continuación
del milagro de las Bodas de Caná con varios sirvientes que llenan de agua otras
cuatro tinajas para obtener vino, de acuerdo con las instrucciones de Jesús.
18. Multiplicación
de los panes y los peces, en un largo registro que tiene a Jesús en el centro, ayudado
por los apóstoles Andrés y Felipe, que reparten la comida a la multitud.
19. Escena
de una resurrección milagrosa, que puede referirse al hijo de la viuda de Naím,
o a la hija de Jairo, en el extremo izquierdo.
Finalmente (20), en el ático está representada
la Dormición de la Virgen. Aparece tumbada en una cama bajo un dosel, secundada
por once apóstoles que rezan con sus libros. En las arquivoltas se pueden ver
ángeles coronados por doseletes, que portan incensarios, cirios y copas, además
de las figuras de tres arzobispos.
El programa iconográfico se completa con las
esculturas de las jambas, que enfatizan el papel protagonista de la Virgen
María. Esta aparece en el parteluz coronada, pisando el dragón, el áspid, el
basilisco y el león, conforme a las Sagradas Escrituras, al tiempo que ofrece
una flor al Niño Jesús. En las jambas de la izquierda están los tres Reyes
Magos que llevan sus ofrendas, más un escudero que lleva la rienda de sus tres
caballos; en las de la derecha, las figuras de San José, la Virgen María con
Santa Isabel, formando una nueva escena de la Visitación, y Santa Ana. Por
último, en el cerco de la puerta se han grabado motivos heráldicos de
castillos, leones y águilas, además de otros animales como un gallo, una cabra,
un ciervo, un perro, etc., y una serie de flores de gran carnosidad.
MÁS INFORMACIÓN:
https://elpincelconlienzo.wordpress.com/2013/11/13/la-puerta-del-reloj-catedral-de-toledo